En el centro de la ciudad de Cochabamba existe un grupo amplio de personas que se dedican a actividades laborales informales. Dentro de este contexto, existe un subgrupo conocido como los “tawis”, los cuales recorren la ciudad para recolectar y clasificar residuos que luego entregan a diferentes empresas de la ciudad que los toman como materia prima para reciclarlos y obtener otros productos.
Las familias que componen el subgrupo de los “tawis”, son de escasos recursos económicos, educativos y sociales, lo que aumenta la vulnerabilidad de los menores de edad ya que quedan expuestos a grandes riesgos y se incrementa significativamente las posibilidades de que queden en condición de calle o delincuencia.
Con el objetivo de lograr una gestión adecuada y urgente de los residuos sólidos, se han llevado a cabo una serie de acciones estratégicas y colaborativas. En primer lugar, se han establecido relaciones y acuerdos de cooperación con cinco acopiadoras locales para garantizar unas condiciones de compra favorables para las familias y promover una economía circular en la comunidad. Por otro lado, se ha dotado a 7 colegios con contenedores de diferentes capacidades para la separación de residuos, optimizando la recolección.
La evolución de la “Asociación de Eco-recolectores defensores del medio ambiente” hacia una cooperativa reconocida legalmente, ha fortalecido las capacidades competitivas y los ingresos de las familias, eliminando a los intermediarios y empoderando así a las personas recolectoras. Con el fin de apoyar la cooperativa se les ha proporcionado equipamiento esencial para la recogida de residuos.
Por otro lado, se ha creado una Red de Voluntariado, la cual colabora en actividades de educación ambiental y solidaridad con las personas recicladoras, lo que fortalece el tejido comunitario y promueve la seguridad alimentaria.
Estas acciones, aparte de tener beneficios económicos, han generado un cambio en la percepción social del trabajo las personas eco-recolectoras. Antes estigmatizado, ahora se valora y se dignifica su labor como contribuyentes fundamentales al cuidado del medio ambiente y el desarrollo sostenible de la ciudad de Cochabamba.